SALSA MARINARA RÁPIDA

En vista de que dispongo de mas tomates de los necesarios para la semana; y, en vista de que no soporto que la comida se pudra y haya que botarla; y, en vista de que es domingo y tengo tiempo, he decidido aprovechar de hacer salsa para pastas, para almorzar hoy y para guardar embotellada para otro día.

Ingredientes:

10 tomates grandes

1 zanahoria

1 cebolla blanca grande

1 ramita de perejíl fresco

2 cucharadas de azúcar

1 cucharadita de sal

1 cucharada de orégano seca

1 cucharada de romero seco

1 cucharadita de pimienta negra

Las cantidades, como siempre en este blog, son referenciales: cada quién que le ponga la cantidad que le guste.

Primeramente hay que preparar los tomates: 

Con un cuchillo afilado se les hace una incisión en la piel en forma de cruz, se llevan al fuego en una olla con suficiente agua que los cubra. Hierven unos pocos minutos, hasta que uno vea que la piel se les comienza a desprender y toman un color rojo fuerte.

Se sacan del agua hirviendo con una espumadera y se colocan en un bol con agua helada.

Una vez enfrían un poco, se les quita la piel con facilidad. Lo ideal es también eliminar las semillas, cosa que esta vez no he hecho por dos razones: porque hoy quiero irme por el camino más facil; y porque unas cuantas pepitas no van a dañar la salsa.

Se cortan bien pequeños, en el procesador de alimentos, la cebolla, la zanahoria y el perejil fresco.

En una cacerola se pone a calentar aproximadamente 1/4 de taza de aceite.

Se sofríen la cebolla y la zanahoria hasta marchitar un poco, se añaden los tomates, triturando con el tenedor. Se añade la sal, azúcar y demás condimentos. Se cocina, tapado, a fuego bajo. Se debe cocinar por un rato largo. Cuando la salsa esta lista se deja enfriar y se tritura con el procesador, licuadora, tenedor, o como uno quiera

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